
Este año se cumplen 10 años de aquel primer disco de Spheniscidae. Mi primera banda. Saqué uno en 2012 y otro, Nuevo Espacio, en 2015. Con los dos discos de Spheniscidae empecé a afinar, aparecer en prensa, girar por salas de pequeño/mediano aforo de todo el país, compartir escenario con artistas que admiraba y vivir aventuras como una pequeña gira en México –todo lo que es disfrutar de tener un grupo hasta que más o menos en 2016 se paró.
Con Geografies todo cobra electricidad. Desde la maqueta en 2015, el concepto de hacer rock en valenciano honesto y sin ornamento funcionó, y con los dos discos posteriores (2016 y 2017), estuvimos en varios premios como el Ovidi Montllor, Sona9 o Sona la Dipu. Una repercusión que nos llevó a los grandes festivales del levante: Deleste, Festival de les Arts, Mercat de Música Viva de Vic, Gran Fira de València, Low Festival, Arenal Sound…
Con los años, más crecido y más valiente, decidí firmar los discos como Íñigo Soler. Hace un par de años publiqué “Ahora que está en blanco”, un disco en el que cada canción es un día de la semana, y va desde lo difícil de los lunes a la calma reflexiva del domingo. Hace un año «Nuestra mejor versión» me salvó la cuarentena. Y este año he escrito «Cosas que decir a tiempo». Aún no me creo que vaya a ser capaz de enseñarlo. Es el disco en el que dejo de guardarme todo de lo que creo que es importante hablar.
Me muevo despacio, como un randonneur, un ciclista de larga distancia para el que el viaje es más importante que la competición. Cada vez escribo con más paz.
Contacto: cerca@inigosoler.com